JESÚS/ MIENTRAS VAIS/ MATEO 28:16-20

Pero él se acercó y les dijo:

«Dios me ha dado todo el poder para gobernar en todo el universo. Ustedes vayan y hagan más discípulos míos en todos los países de la tierra. Bautícenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Enséñenles a obedecer todo lo que yo les he enseñado. Yo estaré siempre con ustedes, hasta el fin del mundo.» (Mateo 28:18-20)

Este pasaje, con el que concluye el evangelio de Mateo, es conocido como la Gran Comisión en la cual Jesús delega en sus discípulos, y por extensión en todos nosotros, la responsabilidad de hacer discípulos a todas las naciones. Los relatos tan familiares hacen que sea muy difícil el poder encontrar algo nuevo y fresco cuando uno se acerca a ellos.

No soy un erudito del idioma griego, sin embargo, en este pasaje es precisamente el idioma el que nos permite ver un matiz importante que se ha perdido a la hora de traducirlo al castellano. Literalmente el tiempo verbal vendría a decir lo siguiente: "Y mientras vais, id haciendo discípulos" ¿Qué aporta de nuevo este matiz? Algo muy importante a mi parecer, la Gran Comisión no es una actividad que se planifica en el horario de la iglesia o en nuestra agenda personal, antes al contrario, la Comisión se lleva a cabo en el contexto de la vida cotidiana, del día a día, en la familia, el trabajo, la escuela o universidad, en la política, las artes, la cultura, la economía, las ciencias y un etcétera tan largo como tu quieras hacerlo. 

Mientras vamos, mientras vivimos, mientras desarrollamos nuestro proyecto vital hacemos discípulos en todos los ámbitos pues, al fin y al cabo -nuevamente el idioma- lo que hemos traducido por naciones en nuestras versiones castellanas es la palabra griega etné, que literalmente significa cualquier grupo humano definido por tener características en común.

Se acabó Mateo y se acabó la exploración del mismo.

Mañana seguirás haciendo tu vida normal ¿Qué significaría cumplir la Gran Comisión en tu contexto, en tu normalidad, en tu día a día?