ENCUENTROS CON JESÚS: PERSONAS QUE FUERON ALIMENTADAS
Estoy seguro de que me buscáis no por los milagros que habéis visto, sino porque comisteis pan hasta saciaros. Deberíais preocuparos no tanto por el alimento transitorio, cuanto por el duradero, el que da vida eterna. Este es el alimento que os dará el Hijo del hombre, a quien Dios Padre ha acreditado con su sello. (Juan 6) Las personas que participan de este encuentro con Jesús son parte de las que poco antes habían experimentado el milagro de la multiplicación de los panes y los peces. Honestamente, puedo entender su razonamiento: hay alguien que tiene la capacidad de sacar pan y peces de la nada, de calmar nuestra hambre de forma permanente, hagámosle rey. Consecuentemente, comenzaron un viaje arriba y abajo a lo largo del lago en busca de Jesús. Ellos buscan satisfacer sus necesidades materiales; Jesús les indica que ese no es el propósito de su venida. No que no las considere importantes, si así fuera, no los habría alimentado, sino que hay otras necesidades más profundas, más i