MIS PENSAMIENTOS

A nadie devolváis mal por mal. Esforzaos en hacer el bien ante cualquiera... No permitas que te venza el mal, antes bien, vence al mal a fuerza de bien (Romanos 12: 17 y 21) Todo este pasaje parece como un auténtico manual del agente de restauración. Está lleno de pautas claras, directas y sencillas acerca de cómo vivir de forma práctica esa vocación y ese llamamiento. Entre los muchos he querido destacar la invitación, por dos veces, del apóstol a que vivamos haciendo de la práctica del bien un estilo de vida. Tres formas prácticas no pueden ayudar en este sentido. La primera, no pagando a otros con la misma moneda, es decir, no pagando mal por mal. Uno es consciente que, precisamente, eso es lo que le pide el cuerpo ¡Qué aprenda! pero eso es precisamente lo que la Biblia nos dice que no hagamos. La segunda, es que seamos proactivos, intencionales, en hacer el bien a cualquier persona que esté en nuestro círculo de acción e influencia. Es fácil hacerlo con aquellos ...