¿QUÉ PASÓ CON EL PRIMER AMOR?
Pero tengo una queja contra ti, y es que has dejado enfriar tu primer amor. Reflexiona, pues, sobre la altura de la que has caído, conviértete y vuelve a portarte como al principio. De lo contrario, si no te conviertes, vendré a ti y arrancaré tu candelero del lugar que ocupa. (Apocalipsis 2:4-5) El amor, tal y como lo entiende la Biblia, no puede basarse en las emociones ni estas le pueden dar consistencia y continuidad. Amor es compromiso y éste nace la voluntad, es intencional y pro activo; es, en definitiva una opción por algo o alguien que implica, necesariamente, la renuncia a otras cosas. Siempre me ha sorprendido los llamamientos de Dios a la fidelidad y a amarle. Cuando era más inmaduro los consideraba -aunque mi mente lo negara- como las exigencias de alguien que quería una relación tóxica y exclusiva. Hasta cierto punto me parecía como una demanda infantil. Un Dios que precisa ser el centro del universo y que requiere, como un adulto egocéntrico, nuestra ate