ENCUENTROS CON JESÚS: MARÍA, MARTA Y LÁZARO
Marta dijo a Jesús: -Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano. (Juan 11:17-46) Hay ocasiones en que como Marta, María o los judíos que acudieron a consolarlas, podemos pensar que si Jesús hubiera estado físicamente presente las cosas en nuestras vidas, con nuestras circunstancias, hubieran sido totalmente diferentes. El Señor no siempre cumple nuestros deseos o satisface nuestras esperanzas. Sin embargo, a diferencia de Marta y María que necesitaban su presencia física, nosotros tenemos la presencia permanente de Jesús que vive en nosotros por medio de su Espíritu y, de esta manera, puede mantener su promesa de estar con nosotros todos los días hasta el fin y no dejarnos huérfanos. Su presencia está garantizada, nuestras expectativas no siempre. Pensemos en Juan el Bautista, el primo de Jesús y de quien dijo elogios y reconocimientos increíbles. Sin embargo, no impidió que fuera injustamente ejecutado por Herodes. Encontrarnos con el Jesús con quien