JESÚS, PRÓJIMO
Pero queriendo él justificarse a sí mismo, dijo a Jesús: ¿Y quién es mi prójimo? (Lucas 10:29) Lucas recoge un diálogo entre Jesús y un maestro de la ley. Si hubiera que ponerle título al mismo podría ser: "Cristianismo básico". Jesús hace un brillante resumen de lo que significa la fe, su esencia, su médula, lo básico, lo no negociable. Simplemente es amar a Dios y al prójimo. Todo se resume única y exclusivamente en eso. Más claro, agua. Confrontado con la respuesta de Jesús y, tal y como nos indica Lucas, con la intención de justificarse a sí mismo le pregunto acerca de a quién debía considerar su prójimo. El concepto de un judío acerca de su prójimo era tremendamente limitado. En primer lugar tenía que ser únicamente judío. Un gentil no era considerado como prójimo. Un medio judío, como eran los samaritanos, era aún más despreciable. Pero el hecho de pertenecer al pueblo de Israel no garantizaba el tratamiento de prójimo. Cobradores de impuestos, pecadores y