PRIMERA CARTA DE PABLO A LOS CRISTIANOS DE CORINTO/ LOS DONES/ 14:1-25

Pues lo mismo ustedes: ya que tanto ambicionan los dones del Espíritu, procuren, al menos, poseer en abundancia los que contribuyan al provecho espiritual de la Iglesia. (1 CORINTIOS 14:12 BLPH) Este pasaje, en el que se habla del don de lenguas y su uso, ha causado mucha controversia entre los seguidores de Jesús. Lejos de mi interés tomar partido en un sentido u otro. Mucho menos pretender acabar con una discusión que dura siglos. Lo que quiero resaltar y creo que en ello todos podemos estar de acuerdo es en el propósito y principio que debería regir el uso de los dones, a saber, y tal y como dice el apóstol, debería ser el provecho espiritual de la iglesia, la edificación de la misma. De modo que siguiendo la enseñanza del apóstol si quieres un don asegúrate que sea aquel que más edifique a la congregación y si quieres usarlo asegúrate que sea para bendición y edificación de la comunidad. El resto, aunque pueda ser importante, siempre será secundario.