JESÚS, DIOS, PADRE

El que me ve a mí, ve al Padre. (Juan 14:9) Si Dios es como Jesús mirando a este último podemos hacernos una imagen más nítida y precisa de cómo es Él. El Maestro nos enseñó que Dios es un padre. Este era un concepto totalmente ajeno al judaísmo de la época de Jesús. De hecho, en la oración conocida como el Padrenuestro, se refiere a Dios como papá o papaíto. Una denominación tremendamente íntima y cariñosa y que nuestras Biblias han traducido por el más formal término "padre". Que Dios sea un padre es a la vez una buena y mala noticia. Es mala porque como ya vimos nuestra tendencia es a proyectar sobre la divinidad nuestras propias imágenes y realidades humanas. La experiencia que hayamos tenido con nuestro progenitor físico, la relación que hayamos mantenido con él puede ser la base sobre la cual construyamos nuestra imagen de Dios como padre. El Señor se convertiría de este modo en nuestro padre amplificado y, como ya comenté anteriormente, ...