ÉXODO PARTE III/ LOS ACONTECIMIENTOS DEL SINAÍ/ CAPÍTULO 19

El Señor le dijo: Ahora desciende y regresa después acompañado de Aarón; pero que los sacerdotes y el pueblo no traspasen los límites para venir adonde yo estoy, no sea que los haga morir. Varias veces en este capítulo el Señor advierte a Moisés que, bajo ningún concepto, el pueblo debería de traspasar un cierto límite al acercarse al monte Sinaí. Cualquiera que lo traspasara, fuera persona o animal debería de morir. La advertencia se hace de forma repetitiva en un intento, por parte del autor del texto, de querer subrayar la importancia del mandato dado por Dios. Al leerlo lo primero que he pensado ha sido que debe ser algo muy serio para que sea necesaria tanta repetición. Lo segundo que ha venido a mi mente ha sido el contraste. Contraste entre la prohibición del Sinaí de acercarse al lugar "donde Dios mora" a todo ser humano que no sea Moisés y a cierta distancia su hermano Aarón, y el Dios que en Jesús adopta forma humana y toma la iniciativa de acercarse ...