LA FE EN LOS TIEMPOS DEL CORONAVIRUS: VOLVER A PESCAR
Pedro les dijo: — Me voy a pescar. Los otros le contestaron: — Vamos también nosotros contigo. (Juan 21:3) Después de la muerte de Jesús, y a pesar de su resurrección, los discípulos se quedaron totalmente desconcertados. Sin duda, se preguntaban qué debían de hacer en aquellos momentos. Ante la incertidumbre y la desorientación, a pesar del hecho milagroso de la resurrección del Maestro, volvieron a aquello que les daba seguridad y les era familiar: la pesca. Pedro tomó la iniciativa y los otros le siguieron. Aquel era un territorio conocido y seguro para todos ellos. Jesús, como podemos ver en el resto del capítulo (y vale la pena leerlo) interrumpió en sus vidas nuevamente y les encomendó nuevamente a la misión. La crisis del COVID-19 puede representar tan sólo un paréntesis en nuestra forma de vivir la fe y el deseo de volver a la normalidad lo antes posible olvidando estos aciagos tiempos. Pero también, si lo deseamos, si permitimos que el Espíritu Santo trabaje en n