EL PODER DE UNA VIDA

Jesús sigue hablando a las multitudes acerca del reino de Dios y dice lo siguiente: El reino de Dios puede compararse al grano de mostaza que el labrador siembra en el campo. Se trata, por cierto, de la más pequeña de todas las semillas, pero luego crece más que las otras plantas del huerto y llega a hacerse como un árbol, hasta el punto de que en sus ramas anidan los pájaros. También les dijo: -el reino de Dios puede compararse a la levadura que una mujer mezcló con tres medidas de harina para que fermentara toda la masa. La moraleja es sencillo, comienzos pequeños e insignificantes pero grandes impactos posteriores. Así es el reino de Dios, lo comenzó un simple carpintero de Palestina y hoy en día tiene influencia en todo el mundo. Pero me ha hecho pensar en el impacto que la vida de cualquier cristiano puede tener. Pablo, nos dice en una de sus cartas que debemos vencer con el bien al mal . En este mundo donde el mal en todas sus manifestaciones es tan evidente puedo vencerlo cada ...