ADAN/ EL TRABAJO/ GÉNESIS 2

Dios, el Señor, tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara... Entonces, Dios el Señor, modeló con arcilla del suelo todos los animales terrestres y todas las aves del cielo, y se los llevó al hombre para que les pusiera nombre. (Génesis 2:15-20) Una de las leyendas urbanas del cristianismo es que el trabajo es una maldición de Dios. Las Escrituras comienzan con Dios en pleno despliegue de su trabajo creativo. También veo a Dios dándole al ser humano el privilegio y la responsabilidad de trabajar. El trabajo ya existía antes de la rebelión y consecuente caída de Adán. Veo en este pasaje al Señor dándole a Adán la doble responsabilidad de cultivar y cuidar la tierra y dar nombre a todos los animales. El trabajo pues es parte de esa creación que cuando terminó Dios afirmó con satisfacción que era muy buena. Ahora bien, el trabajo, como todo el resto de lo creado por Dios se vio afectado por la rebelión y desobedie...