ROMANOS/ EL CRISTIANO Y LA LEY II

Un mandamiento que debía ser portador de vida, se convirtió para mí en instrumento de muerte. Porque el pecado se aprovechó del mandamiento para engañarme, y, valiéndose de él, me causó la muerte. (Romanos 7:10-11) Pablo continua desarrollando su argumento acerca del papel y el propósito de la ley. Afirma que ésta en absoluto era o es mala. Sin embargo, su papel no era ni es el de salvar a las personas, antes al contrario, poner de manifiesto la necesidad que las personas tenemos de ser salvadas ante nuestra incapacidad para cumplir los requisitos de la ley. Es una paradoja porque algo bueno como es la ley lo único que hace es incrementar más y más el pecado. Pero a la vez es totalmente necesario porque al ser éste un problema interno sería imposible para nosotros poderlo detectar y ser conscientes del mismo si la ley no lo señalara al mostrarnos nuestras conductas, actitudes, motivaciones, omisiones, etc. La ley es un espejo en el que me puedo mirar y que sim...