CONTRADICCIONES (SALMO 54)

Que el mal se vuelva contra mis rivales y Tú, por tu fidelidad, hazlos perecer. (Salmo 54:5) ¿Qué decir ante esta afirmación del salmista? Afirma lo que afirma y no lo podemos negar. Hemos de hacer muchas cabriolas mentales para justificar una oración de este tipo de parte de una de las personas que son denominadas en las Escrituras, como poseedoras de un corazón según Dios. De hecho, la vida de David está llena de violencia, adulterio, crímenes premeditados y disfuncionalidad en su familia. De él podemos aprender tanto las cosas que debemos hacer como aquellas que debemos evitar. Ahí está, y creemos que los salmos son Palabra del Señor por Él inspirada. Pero luego nos acercamos a los evangelios y nos encontramos con Dios en la persona de Jesús. La divinidad hecha ser humano, viviendo como nosotros y entre nosotros. Y Jesús contradice total y absolutamente lo que dice David. El Maestro nos manda que amemos a nuestros enemigos y que oremos por ellos. Sus enseñanzas...