CÍRCULO VIRTUOSO
Sabéis de sobra que, si os ponéis al servicio de alguien dispuestos a obedecerle, os convertís en sus esclavos: esclavos del pecado que os llevará a la muerte, o bien esclavos de la obediencia a Dios que os llevará a vivir correctamente. (Romanos 6:16) El escenario es el siguiente: la gracia nos da una posición segura, inalterable acerca de nuestra relación personal con el Padre. Nada que hagamos o dejemos de hacer añadirá o quitará a esa relación. Lo que Pablo plantea en estos pasajes de Romanos no tiene que ver con nuestra posición -de nuevo insisto inalterable-, sino nuestra vida cotidiana, el uso que hagamos de esta condición de libres, amados y aceptados. Sartre, el famoso pensados francés, afirmaba que somos nuestras elecciones. Si haciendo uso de nuestra libertad escogemos ponernos al servicio del mal entramos en un círculo vicioso que más y más nos irá convirtiendo en esclavos, esta vez por propia elección del mal. Sin duda, no caeremos de la gracia, pero tampoco la experimen