¿TIENES UNA FALSA IMAGEN DE DIOS?

No os fabriquéis ningún ídolo, ninguna imagen de aquello que el Señor te ha prohibido. (Deuteronomio 4:23) Los cristianos evangélicos somos iconoclastas, es decir, que desaprobamos la adoración, veneración o culto de imágenes. Lo hacemos porque en varios lugares del Antiguo Testamento -como en este versiculo- se nos indica una y otra vez que no debemos hacerlo. Sin embargo, a lo largo de muchos años de experiencia pastoral me he dado cuenta que muchos seguidores de Jesús no tienen imágenes físicas a las que veneren o adoren, pero, lamentablemente, tienen imágenes mentales del Señor que no se corresponden con la realidad de quién es Él y son esas falsas imágenes las que conforman su visión del Señor y, consecuentemente, su relación con Él. Porque las imágenes mentales son muchísimo más poderosas que las físicas y muchísimo más dañaninas si son falsas. He compartido, aconsejado y acompañado espiritualmente a personas cuya imagen de Dios era distorsionada. Una distorsión causada por...