EL SERMÓN DEL MONTE 5/ FELICES LOS HUMILDES/ MATEO 5

Felices los humildes, porque Dios les dará en herencia la tierra. (Mateo 5:5) Barclay escribe su paráfrasis de esta bienaventuranza del siguiente modo: ¡Qué feliz es el hombre que sabe cuándo montar en ira y que nunca se enoja a destiempo, que ha aprendido a controlar sus instintos, impulsos y pasiones, porque ha puesto su vida bajo el gobierno de Dios, y que tiene la suficiente humildad como para reconocer su propia ignorancia y debilidad, porque el hombre que posee tales virtudes es rey entre los hombres! Parece una paráfrasis excesivamente larga para un texto tan sencillo y breve. El problema es que las palabras griegas son tan ricas en significado que ninguna de las que usamos para traducirlas –manso, humilde- pueden transmitir todo el contenido. Este es un claro caso. Porque el término que se usa en griego puede tener tres precisas acepciones que Barclay ha tratado de reunir en su paráfrasis. En primer lugar, manso, en el griego, no tiene la connotación de s...