EL SERMÓN DEL MONTE 16/ OCASIÓN / MATEO 5
Así que, si tu ojo derecho es para ti ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo lejos de ti. Más te vale perder una parte del cuerpo que ser arrojado entero a la gehena. Y si tu mano derecha es para ti ocasión de pecado, córtatela y arrójala lejos de ti. Más te vale perder una parte del cuerpo que ser arrojado entero a la gehena. (Mateo 5:29-30) ¡Duras estas palabras de Jesús! ¿Deberían ser tomadas al pie de la letra! Sabemos que a lo largo de la historia han habido personas que así lo han interpretado; también sabemos que eso no ha solucionado el problema porque, como nos dice el versículo anterior, la raíz del mismo radica en el corazón; los diferentes miembros del cuerpo simplemente ejecutan aquello que se gesta, crece y, posteriormente, brota del corazón. ¿Cuál es pues la alternativa? ¿Qué podemos hacer? Cada ser humano es único y singular; respondemos a estímulos diferentes; cada uno de nosotros tiene áreas o aspectos de vulnerabilidad distintos. Creo que este pasaje