ENCUENTROS CON JESÚS: PEDRO, LA INCONSISTENCIA
Jesús les dijo: — Todos me vais a abandonar, porque así lo dicen las Escrituras: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas. Pero después de mi resurrección iré delante de vosotros a Galilea. Pedro le dijo: — ¡Aunque todos te abandonen, yo no te abandonaré! Jesús le contestó: — Te aseguro que hoy, esta mis- ma noche, antes de que el gallo cante por segunda vez, tú me habrás negado tres veces. Pedro insistió, asegurando: — ¡Yo no te negaré, aunque tenga que morir contigo! Y lo mismo decían todos los demás. (Marcos 14:26-31) Si miramos a nuestro pasado, todos nosotros podemos identificar una buena cantidad de promesas no cumplidas, de compromisos rotos, de buenas intenciones no culminadas y de buenos propósitos que se quedaron en eso, buenos propósitos. Salvo excepciones, sin duda, en el momento en que formulamos todo lo dicho en el párrafo anterior éramos honestos y deseábamos que aquello pudiera cumplirse o llevarse a cabo, sin embargo, no fue así. Tal vez tod