CUARESMA, DÍA 6
Nadie puede servir a dos amos al mismo tiempo, porque aborrecerá al uno y apreciará al otro; será fiel al uno y del otro no hará caso. No podéis servir al mismo tiempo a Dios y al dinero. —Mateo 6:24 Tan importante como la reflexión es el contenido de la misma, es decir, sobre qué re- flexiono. Mi invitación es que este tiempo de Cuaresma sea una oportunidad para re- flexionar sobre nuestras lealtades. Me gusta porque el diccionario indica que alguien leal o fiel es aquel que es constante en sus afectos y no defrauda la confianza depositada en él. Jesús plantea con claridad y crudeza la imposibilidad de tener dos lealtades paralelas. No es posible mantenerlas porque siempre prevalecerá una en detrimento de la otra. Vivir con dos lealtades es vivir en constante conflicto y tensión. El Maestro usa el ejemplo o la ilustración del dinero, pero hemos de verlo de manera descriptiva y no exhaustiva, dicho de otro modo, el dinero no es la única doble lealtad que puede empañar