ABEL/ OFRENDA/ GÉNESIS 4

Al cabo de un tiempo, Caín presentó de los frutos del campo una ofrenda al Señor. También Abel le ofreció las primeras y mejores crías de su rebaño. El Señor miró con agrado a Abel y su ofrenda, pero no miro del mismo modo a Caín y la suya. (Génesis 4:3) Esta es la primera vez que se registra en la Biblia una ofrenda al Señor. No sabemos cómo se estableció la costumbre y dónde la aprendieron Caín y su hermano Abel. Supongo, sin embargo, que detrás de la misma debía de existir el deseo de honrar a Dios, agradecerle su provisión, reconocer su providencia. Del mismo modo deduzco que los seres humanos estamos diseñados para adorar a algo o alguien y, si no es el Señor el objeto de nuestra adoración, buscaremos cualquier otra cosa. El texto indica que la ofrenda de Abel fue cualitativamente mejor que la de Caín. El pastor ofreció lo mejor de su rebaño. Caín, contrariamente, simplemente de los frutos del campo. Una ofrenda fue acogida con agrado por el S...