PRIVACIONES
Y ya veis de cuántas cosas se privan los que se entrenan con vistas a una prueba deportiva. Ellos lo hacen para conseguir una corona que se marchita; nosotros, en cambio, aspiramos a un trofeo imperecedero. (1 Corintios 9:25) Leyendo a autores como Paulo Cohelo y Steve Covey aprendí algo que me ha acompañado durante años. Algo que tiene todo el sentido del mundo. Para poder decir NO a muchas cosas uno necesita un gran SI que haga que todos los pequeños o, en ocasiones, no tan pequeños noes de la vida cotidiana puedan ser asumidos. De lo contrario, sin ese gran SI, es muy difícil el poder privarse o incorporar cosas en nuestra vida. Pablo lo ilustra con la idea del atleta. Un deportista de élite no lleva una vida fácil. De hecho, la lleva bastante reglada y pautada. Está claro para él o ella las cosas que puede hacer y las que no. Hay una frase en inglés que lo resume muy bien: "no pain, no gin". Pero para el atleta vale la pena. Hay una meta a lograr que justifica todos eso