ABRÁN/ BENDICIÓN PARA OTROS/ GÉNESIS 12

Dios le dijo a Abram: «Deja a tu pueblo y a tus familiares, y vete al lugar que te voy a mostrar. Con tus descendientes formaré una gran nación. Voy a bendecirte y hacerte famoso, y serás de bendición para otros. Bendeciré a los que te bendigan, y maldeciré a los que te maldigan. ¡Gracias a ti, bendeciré a todas las naciones del mundo!» (Génesis 12:1-3) En el capítulo 12 de Génesis comienza la saga de Abraham el patriarca. Todo tiene su inicio donde quedó Téraj, su padre, en Jarán, a medio camino de la tierra de Canaán. Todo parece indicar que Abrán -nombre con el que se le conoce al comienzo de su saga- debía completar aquello que su padre dejó a medio hacer. Al observar el llamado de Abrán hay dos cosas que me llaman la atención, dos cosas que no hace falta ser muy espabilado para ver que se dan, a menudo, en los llamados del Señor. La primera, dejar. La segunda, un propósito para el llamado. En este caso tuvo que dejar su familia y fue escogid...