OSEAS/ GRACIA/ OSEAS 3
El Señor me dijo: -Vete de nuevo y ama a una mujer amada por otro y adúltera, porque así también el Señor ama a los israelitas, aunque ellos se vuelven a otros dioses y saborean los pasteles de pasas (Oseas 3:1) Una de las acusaciones -no sin fundamento- que recibimos con más frecuencia los seguidores de Jesús es la de nuestra actitud de juicio y condena hacia otras personas. Despreciamos y juzgamos a colectivos e individuos porque sus formas de pensar y vivir no se ajustan a lo que la Palabra de Dios enseña o pensamos que enseña. Esta falta de compasión y misericordia hacia el pecador hace que muchas personas se alejen de nosotros y, consecuentemente, encuentren barreras en su viaje espiritual. Siempre he pensado que esto se debe a que con demasiada frecuencia los cristianos olvidamos nuestros orígenes, quiénes somos y de dónde venimos. Este pasaje, aunque se refiere a Israel, aplica perfectamente a la iglesia y su descripción encaja perfectamente con lo que somos tod