RESTAURAR (SALMO 119)
He reflexionado sobre mi conducta, me comporto según tus mandamientos. (Salmo 119:59) Hay que cumplir los mandamientos del Señor. Él está atento y controlando a cada persona que se identifica como cristiana para ver el grado de obediencia, y presto para castigar a aquellos que por acción u omisión se los salten. Siempre hay ojo observador, consecuentemente, hemos de ir con cuidado. Es una relación basada en el miedo y la desconfianza. Por burdo que pueda parecer el párrafo anterior refleja la relación que muchas personas tienen establecida con el Señor. Una relación basada en el miedo, la inseguridad y la desconfianza. Dios continúa siendo percibido como el juez implacable, no como el Padre amoroso. Ya lo decía bien el apóstol Juan, el amor echa fuera el miedo; el que tiene miedo no ha entendido para nada el amor. Yo creo, y así lo he experimentado una y otra vez, que sus mandamientos traen vida. Que Dios es un Dios de amor, gracia y compasión y que cada uno de sus preceptos refleja