CUARESMA, DÍAS 37 Y 38
Entonces Pilato, queriendo contentar a la gente, ordenó que pusieran en libertad a Barrabás y les entregó a Jesús para que lo azotaran y lo crucificaran. (Marcos 15:15) El punto clave es que para el gobernador romano lo importante es que las personas estuvieran contentas, la verdad, la justicia, la integridad quedaban en un segundo plano; la opinión pública es lo que contaba. A mi mente ha venido el pensamiento de cuántas veces contentar a otros -algo que no es malo per se- ha sido más importante que contentar a Dios. Cuántas veces ante el conflicto de lealtades he optado por el hombre y no por el Señor. De nuevo, la Cuaresma nos invita a mirarnos a nosotros mismos e identificar si eso es real o no en nuestra vida y, como consecuencia de esa evaluación actuar en consecuencia?