JESÚS Y LA CULPA
Perdonaré sus culpas y ya no me acordaré de sus pecados. Jeremías 31:34 La culpa es un sentimiento de pesar por algo que hemos hecho o dejado de hacer que consideramos que está mal. La culpa está vinculada con una acción o hecho específico que sentimos ha violado nuestra conciencia o ha causado mal a otros. En un principio la culpa es positiva ya que indica que estamos moral y espiritualmente sanos y tenemos la capacidad de distinguir entre lo correcto y lo incorrecto. La culpa puede llevarnos al arrepentimiento, a la restitución del daño causado a otros y a un aprendizaje que puede sernos útil para el futuro. El apóstol Pablo en 2 Corintios 7:10 habla de esa culpa saludable, que proviene del Señor y que nos lleva al arrepentimiento. La gran verdad de la Escritura es que el sacrificio de Jesús ha pagado por todos nuestros pecados, pasados, presentes y futuros. La gran promesa es que cuando los confesamos el Señor nos perdona y, tal y como repite una y otra vez la Biblia, ya no se acu