SALMO 119. Y. COMPASIÓN

Tus manos me hicieron y me plasmaron, instrúyeme y aprenderé tus mandatos. Me miran los que te respetan y se regocijan, porque he confiado en tu palabra. Señor, bien sé que tus mandamientos son justos, que con razón me humillaste. Que tu amor sea mi consuelo según prometiste a tu siervo. Que me alcance tu compasión, y viviré, porque tu ley es mi delicia. Sean confundidos los orgullosos que me calumnian, yo meditaré tus decretos. Vuelvan a mi los que te honran: que conozcan tus preceptos. Sea mi corazón íntegro en tus normas, así no quedaré avergonzado. Leyendo esta estrofa del salmo 119 mis ojos fueron directos a la palabra compasión. Pensaba en cuál es la diferencia entre términos como, compasión, misericordia , lástima y otros similares. De alguna manera todos ellos son producidos por una situación de necesidad, abandono, desamparo o postración de otro ser humano. Pero aunque una determinada situación puede producir estos diferentes sentimientos, hay matices esenciales e important...