SALMO 129. BENDECIR


¡Que el Señor te bendiga!
Os bendecimos en el nombre del Señor.


Las palabras del salmo son bien sencillas y me han retado grandemente ¿Qué tipo de vida vivo? ¿Soy un agente de bendición que por donde paso dejo un rastro positivo y que hace bien a la gente? ¿Soy un buen imitador de mi Maestro, Jesús, en este sentido?

Porque si no lo soy ¿Entonces qué sentido tiene mi vida y qué sentido tiene identificarme como seguidor de aquel que por donde pasó dejó una estela de bondad, amor y bendición?

Porque está claro, en este mundo roto no hay opción posible, o vivo profundizando tanto dolor y rompimiento como existe o, por el contrario, me alineo con Jesús y su ministerior restaurador del mundo roto.

Señor, ayúdame a bendecir, a todos y en todo momento.


Un principio

Ser imitadores de Jesús bendiciendo a otros.

Comentarios

Entradas populares de este blog

SE PROPICIO A MÍ PECADOR

ESCLEROSIS

CORAZÓN INCRÉDULO