ESCUCHAR LA VOZ DE DIOS


He recibido la palabra del Señor
y os la he comunicado día tras día,
pero no habéis escuchado.
También el Señor os ha enviado
puntualmente a sus siervos los profetas
pero no escuchastéis ni os esforzastéis
por escuchar
(Jeremías 25:3 y 4)

Dios envió su Palabra y a sus profetas para guiar, enseñar y advertir al pueblo de Judá, sin embargo, tal y como dice el Señor por medio del profeta, el pueblo no escuchó, ni siquiera se esforzó por escuchar y hacer caso al mensaje que ellos trajeron.

Simplemente pienso en mi caso ¿escucho la Palabra del Señor? ¿Me esfuerzo por comprenderla? ¿Me esfuerzo por aplicarla? ¿Son sensible a Dios cuando me habla por medio de otras personas? ¿Y cuando lo hace por medio de las circunstancias?

Quiero pensar seriamente en esto ya que cada vez que cierro mi oído a su palabra y a sus siervos endurezco mi corazón.

Comentarios

Entradas populares de este blog

SE PROPICIO A MÍ PECADOR

ESCLEROSIS

CORAZÓN INCRÉDULO