JESÚS/ SEÑAS DE IDENTIDAD/ MATEO 7:15-20

15 Tened cuidado con los falsos profetas. Se acercan a vosotros haciéndose pasar por ovejas, cuando en realidad son lobos feroces. 16 Por sus frutos los conoceréis, pues no pueden recogerse uvas de los espinos, ni higos de los cardos. 17 Todo árbol sano da buenos frutos, mientras que el árbol enfermo da frutos malos. 18 Por el contrario, el árbol sano no puede dar fruto malo, como tampoco puede dar buen fruto el árbol enfermo. 19 Los árboles que dan mal fruto se cortan y se hace una hoguera con ellos. 20 Así pues, también vosotros conoceréis a los falsos profetas por sus frutos. (Mateo 7:15-20)

En coaching usamos una técnica que se denomina la segunda y tercera posición. Consiste en pedirle a la persona con la que estamos trabajando que "salga de sí misma" y mire las cosas desde fuera y le preguntamos qué ve cuando mira a su vida, a su reto, sus necesidades, sus relaciones, etc., desde fuera, qué nueva perspectiva gana. Esa es la segunda posición. La tercera consistiría en preguntarle a la persona qué vería un tercer sujeto si mirara a lo anteriormente dicho. La idea es ver la situación, ya no desde fuera como antes, sino con los ojos "objetivos" de otra persona. 

Al leer este pasaje de Jesús he pensado en esta técnica aplicada a los frutos que mi vida refleja, he estado pensando qué veo cuando miro desde fuera mi propia vida. También he aplicado la tercera posición y me ha llevado a pensar qué es lo que ven otros cuando me miran, de nuevo pensar qué ven reflejado en mi vida. Porque al fin y al cabo, como indica Jesús, lo único que valida mi experiencia y mi genuinidad como seguidor del Maestro son mis frutos, no son mis creencias, mis confesiones de fe, mi participación en una iglesia local, mi ortodoxia, ni nada similar, única y exclusivamente mis frutos que creo que no es osado afirmar que equivale a cuán visible Jesús es en mi vida.