SALMO 77/ ANTÍDOTO
De noche recuerdo mi canto, reflexiono y me pregunto: ¿Nos abandona para siempre el Señor y no vuelve nunca a aceptarnos? ¿Se acabó para siempre su bondad? ¿Ha cesado eternamente su palabra? ¿Acaso olvidó Dios ser compasivo? ¿Ha cerrado con ira sus entrañas?... Sobre todos tus actos medito, sobre tus hechos reflexiono. (Salmo 77:7-13)
Hubo momentos, hay momentos o seguro que habrá momentos en los que uno sienta lo mismo que estaba experimentando Asaf. El peligro es entrar en una espiral que lleve más y más a la miseria y a la desesperación emocional y espiritual. Es normal, es humano, es legítimo el realizarse las preguntas que se hizo el salmista y que expresó en su poema y que Dios honró permitiendo que formen parte de su Palabra inspirada. Pero el mismo Asaf nos da el antídoto -yo diría, con toda humildad, el único que existe- para combatir este tipo de estados; hacer memoria de la intervención del Señor en el pasado en nuestras vidas, recordar su bondad y misericordia pasadas, hacer en esfuerzo por identificar tantas y tantas bendiciones recibidas hasta el presente. No hay mejor antídoto contra la depresión del presente y el miedo del futuro.
¿Qué viene a tu mente al reflexionar sobre los actos y hechos del Señor en tu vida?
Una profunda gratitud. Desde que nací, Dios ha preservado mi vida, físicamente y emocionalmente.
ResponderEliminarSi "Santo es, oh Dios, tu camino" "¡Eres el Dios de grandes maravillas!
Nunca debo de olvidar que es en sus camino donde puedo ver y meditar en sus hechos, fuera es de noche y no puedo ver con claridad. Y así y todo, siempre hay una estrella brillando en el firmamento recordándome quién es el que tiene le control de TODO.
doncs sí, en aquests moments hem de recòrrer a la memòria, tornar a rememorar les seves benediccions a les nostres vides, segur que en trobem infinitats.
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