SALMO 107. PALABRA QUE SANA

Envió su palabra para sanarlos.


Hasta cierto punto este salmo es muy parecido en cuanto a temática al anterior, una invitación a dar gracias al Señor por su bondad, su misericordia y su fidelidad para con los suyos. Comienza con una invitación a la alabanza y va seguido de cuatro estrofas, la de los caravaneros (los que comerciaban con caravanas a través del desierto), la de los prisioneros, la de los enfermos y, finalmente, la estrofa de los marineros. Concluye el poema con un epílogo reflexivo.

A mí, personalmente, de la lectura del salmo me ha llamado la atención el versículo que he reproducido. He pensado las muchas ocasiones en que la Palabra del Señor ha sido sanadora para mi vida y mis circunstancias. En ocasiones ha sido palabra de consuelo, otras lo ha sido de ánimo, en otras circunstancias me ha dado perspectiva, aún en otras me ha reprendido o confrontado con mi propia realidad. Todo y que en ocasiones ha podido ser dura, difícil e incluso dolorosa ¡cuántos tratamientos médicos lo son! siempre ha traído sanidad, crecimiento, madurez y desarrollo a mi vida.

Al leerlo pensaba en cuántas personas en el día de hoy necesitan una palabra sanadora de parte de Dios y he orado para que en su misericordia Él la proporcione hoy.

Un principio

Volvernos a la Palabra para ser sanados.

Una oración

Por todos aquellos que en el día de hoy necesitan una palabra de sanidad de parte de Dios.

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