REBECA Y JACOB/ ENGAÑO/ GÉNESIS 27



¿Quién eres tú, hijo mío? Jacob dijo: Soy Esaú, tu primogénito. (Génesis 27:19)

El engaño es faltar a la verdad en aquello que se hace o se dice. Tiene como destinatario un tercero y como propósito el conseguir algo que si se usara la verdad no sería posible. Quien engaña lo hace con premeditación y alevosía y sin tener en cuenta o, si las tiene sin importarle, las consecuencias que pueda acarrear a terceros. La actitud del engañador es que el fin justifica sus medios. Todo esto describe a Rebeca, quien según el texto urdió toda la trama, y también a Jacob, quien siguió el juego porque le interesaba y había beneficios que podía obtener de la situación.

Dos fueron los destinatarios del engaño, Isaac, quien se vio obligado a bendecir a la persona que no deseaba bendecir y Esaú, que se vio privado de una bendición que legítimamente merecía. Dos fueron los beneficiarios, Rebeca, que como madre de una familia disfuncional consiguió lo que deseaba para su hijo preferido y Jacob, un engañador compulsivo que se benefició de aquello que no le correspondía por segunda vez. 

Pero, al fin y al cabo, Rebeca y Jacob continúan siendo un espejo en el que vale la pena reflejarse y reflexionar. La tentación de conseguir lo que deseamos por los medios inadecuados está siempre presente. Aunque intelectualmente la mayoría de nosotros afirmamos que el fin no justifica los medios, en la práctica hay muchas ocasiones en que vivimos bajo esa regla. Queremos conseguir algo y para ello podemos usar medias verdades y medias mentiras y convencernos a nosotros mismos que es correcto lo que hacemos porque deseamos lo que perseguimos, lo que queremos alcanzar. Nuestro engaño siempre afecta a terceros que se ven forzados a reaccionar ante una información que no es correcta, es parcialmente incorrecta o carece de toda la información que precisa. El engaño manipula para inclinar la voluntad del otro hacia la nuestra de una manera artera, ya que si lo hiciéramos con la verdad no lo conseguiríamos o existiría el riesgo de no obtenerlo.


¿Hay engaño en tu vida? ¿Qué hacer al respecto?

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