SALMO 18. ¿QUIÈN ES DIOS PARA MÌ?

¡Yo te amo, Señor, mi fortaleza!
¡Señor, mi roca, mi defensa, mi libertador!
¡Dios mío, mi roca de refugio!
¡Mi escudo, mi fuerza salvadora,
mi baluarte, digno de alabanza!
¡Señor, mi roca, mi defensa, mi libertador!
¡Dios mío, mi roca de refugio!
¡Mi escudo, mi fuerza salvadora,
mi baluarte, digno de alabanza!
El salmo 18 es un salmo largo que repite un patrón que se encuentra en muchos otros salmos, a saber, un grito de auxilio hacia el Señor, la manifestación de Dios, la declaración del salmista de ser justo y no haber pecado y, finalmente, la derrota de los enemigos seguida por la gratitud y reconocimiento que la victoria viene del Señor.
Para mí la lección del salmo viene de los tres primeros versículos, los reproducidos al comienzo de esta entrada. Me han llamado la atención porque David expresa lo que Dios es para él. Es un hombre oprimido y abrumado por problemas que verbaliza lo que Dios significa para su vida en esos momentos, cómo siente y experimenta a Dios.
Eso me ha hecho pensar en cómo sería el salmo 18 si lo escribiera yo. Qué pondría en esos tres primeros versículos. Cómo visualizo y experimento al Señor en estos momentos, en esta etapa de mi vida. Qué significa Él para mí personalmente.
Para mí la lección del salmo viene de los tres primeros versículos, los reproducidos al comienzo de esta entrada. Me han llamado la atención porque David expresa lo que Dios es para él. Es un hombre oprimido y abrumado por problemas que verbaliza lo que Dios significa para su vida en esos momentos, cómo siente y experimenta a Dios.
Eso me ha hecho pensar en cómo sería el salmo 18 si lo escribiera yo. Qué pondría en esos tres primeros versículos. Cómo visualizo y experimento al Señor en estos momentos, en esta etapa de mi vida. Qué significa Él para mí personalmente.
Un principio
¿Cuál es el contenido de tu salmo?
¿Cuál es el contenido de tu salmo?
Señor, tu eres todo para mi.
ResponderEliminarEres el sentido de mi vida, mi compañia en la soledad, mi fortaleza en las dificultades, mi refugio en las noches de insomnio, mi verdadero y más grande amor.
No te olvides Señor de mi, que nada seria sin ti. Perdona mis debilidades y hazme un corazón fuerte para servirte eternamente.