SALMO 96. HABLA DE DIOS
Contad a los gentiles su gloria,
sus maravillas a todos los pueblos.
Porque el Señor es grande
y muy digno de alabanza;
más temible que todos los dioses.
Pues los dioses de los gentiles son nada.
Mas el Señor hizo los cielos.
sus maravillas a todos los pueblos.
Porque el Señor es grande
y muy digno de alabanza;
más temible que todos los dioses.
Pues los dioses de los gentiles son nada.
Mas el Señor hizo los cielos.
Este poema es una invitación tanto a creyentes como a no creyentes para que reconozcan a Dios y le tributen el honor y la gloria que merece. A fin de que esto sea posible, no a modo de justificación, el salmista va desgranando una serie de razones por las cuales deberíamos hacerlo o que nos pueden inspirar a llevarlo a cabo. El salmo termina con un estallido de júbilo por parte de toda la creación por el hecho de que ¡Al fin! el Señor que reina, gobernará toda la tierra con justicia.
Por tanto, el creyente recibe de parte de la Palabra del Señor esa invitación a sumarse al reconocimiento a Dios, pero recibe una más específica que únicamente un seguidor de Jesús puede hacer, a saber, y tal como se refleja en los versículos que se han escrito en esta entrada, contar a los gentiles, es decir, a aquellos que no conocen a Dios, acerca de Él, su carácter y sus propósitos.
Esta es la lección del salmo para mí, una llamada de atención a no olvidar que hay, a mi alrededor, gente que necesita conocer de Dios. No necesitan hacerlo para unirse a mi iglesia o acrecentar mi denominación, lo necesitan para que Dios pueda restaurar sus vidas, darles sentido, animarles en el dolor, estar junto a ellos en la necesidad y la dificultad. Pero esto solo podrá llevarse a cabo si yo, que conozco al Señor, lo comunico a otros.
Por tanto, el creyente recibe de parte de la Palabra del Señor esa invitación a sumarse al reconocimiento a Dios, pero recibe una más específica que únicamente un seguidor de Jesús puede hacer, a saber, y tal como se refleja en los versículos que se han escrito en esta entrada, contar a los gentiles, es decir, a aquellos que no conocen a Dios, acerca de Él, su carácter y sus propósitos.
Esta es la lección del salmo para mí, una llamada de atención a no olvidar que hay, a mi alrededor, gente que necesita conocer de Dios. No necesitan hacerlo para unirse a mi iglesia o acrecentar mi denominación, lo necesitan para que Dios pueda restaurar sus vidas, darles sentido, animarles en el dolor, estar junto a ellos en la necesidad y la dificultad. Pero esto solo podrá llevarse a cabo si yo, que conozco al Señor, lo comunico a otros.
Un principio
Quien sabe no puede callar
Una oración
La propagación del evangelio en Guatemala.
Quien sabe no puede callar
Una oración
La propagación del evangelio en Guatemala.
Leyendo a Félix, me ha venido a la memoria la frase: "De la abundancia del corazón habla la boca".
ResponderEliminarSi Dios está presente en nuestras vidas, lo nombramos a menudo, oramos antes de las comidas, le damos gracias cuando salimos de una situación difícil, y mucho le pedimos para ayuda en cantidad de ocasiones. La pena es que muchos no nos escuchan aunque sean buena gente. Señor, abre sus corazones a Ti y tambien que en Guatemala se propague el Evangelio.