¿TIENE VALOR LO QUE HACES?
Únicamente aceptaréis el tributo de aquellos que lo ofrezcan de corazón (Éxodo 25:2) Nada de lo que hacemos tiene valor a los ojos del Señor si no está hecho de corazón, es decir, con la actitud correcta. Será porque como dice la Escritura nosotros miramos el exterior -las conductas- mientras que Dios mira el corazón -las actitudes y las motivaciones-. De este breve pasaje de Éxodo podemos deducir que muchas de las cosas que hacemos ni impresionan al Señor ni las valora porque no están hechas de corazón. Pero, en términos prácticos y entendibles, ¿qué es hacer algo de corazón? El apóstol Pablo nos da pistas cuando escribe a los Colosenses (3:22-24). Dice que en todo lo que hagamos pongamos el corazón, como si fuera para Dios y no para los hombres. Personalmente pongo el corazón en aquello que va dirigido a personas a las que amo, a las que deseo honrar, a las que son significativas para mi vida. Entonces hago las cosas con cariño, con excelencia, con mimo, para hacerlas fel...