Entradas

SALMO 8/ ¿QUÉ ES EL HOMBRE?

Imagen
Miro el cielo, obra de tus dedo, la luna y las estrellas que has fijado, ¿qué es el ser humano para que te acuerdes de él, el hombre para que de él te ocupes? (Salmo 8:5) La gracia de Dios, no solamente es escandalosa, es también absurda; no tiene ningún sentido que el Señor haya escogido a una persona como yo; no hay nada valioso ni digno para aceptarme como hijo suyo. El apóstol Pablo lo afirmaba con rotundidad cuando nos decía en la carta a los corintios que Dios ha escogido a lo vil, a lo menospreciado y carente de valor a los ojos de la sociedad. Tiene toda la razón porque cuando me miro a mí mismo no puedo comprender, no puedo procesar el porqué de mi elección, rompe todas las leyes de la lógica y del sentido común; seamos realistas ¡Yo no me escogería a mí mismo! No lo haría porque soy demasiado consciente de cómo soy, me conozco excesivamente bien a mí mismo. Pero la elección de Dios, su deseo de relacionarse con la humanidad todavía contrast...

SALMO 7/ REIVINDICADO

Imagen
Vela por mí tú que estableces la justicia. (Salmo 7:7) El título de este salmo nos indica que fue escrito debido a un tal Kus de la tribu de Benjamín. Dado el tono del mismo podemos suponer que se redactó en relación a los episodios relacionados con la rebelión de Absalón, el hijo de David. Todo parece indicar que la tribu de Benjamín, de la que procedía el anterior rey, Saúl,  tenía asuntos pendientes con el rey y aprovechó el golpe de estado para sacarlos a relucir; recordemos el caso de otro benjaminita, Simeí, quien maldijo públicamente a David cuando este huía de su hijo el golpista Absalón. El contexto del salmo nos indica que David, como sucedió en el caso de Simeí, no actuó directa y abiertamente contra aquellos que le vituperaban y desacreditaban, sino que proclamó su inocencia delante del Señor y espero que fuera Él quien le reivindicara.  Para mí este es un principio espiritual de primer orden que me indica las pautas para actuar cuando mi...

SALMO 6/ VULNERABLE

Imagen
Señor, apiádate de mí que estoy débil; fortaléceme, pues me siento sin fuerzas y estoy profundamente abatido. Señor ¿hasta cuándo? (Salmo 6:3-4) El lenguaje políticamente correcto, aquel que trata de ser lo más neutro posible para no ofender los sentimientos de nadie, está impregnando también la experiencia religiosa; al menos esa es mi opinión. Se extiende la idea de que hay ciertos pensamientos y sentimientos que un auténtico cristiano nunca debería experimentar o pensar y esta idea, totalmente falsa en mi opinión, se vuelve el discurso dominante y el que sirve para juzgar la espiritualidad o carencia de la misma de las personas. Expresiones del tipo, un buen cristiano nunca está triste, nunca tiene dudas, no experimenta frustración o depresión y un largo etcétera que en realidad lo que hacen es matar nuestra humanidad, negarnos el derecho a ser seres humanos.  No es lo que veo en los salmos y me alegro de ello. Estos escritos carecen total y absolutamente d...

SALMO 5/ HÁBITOS

Imagen
Señor, por la mañana escuchas mi súplica; de madrugada ante ti la presento y me quedo esperando. (Salmo 5:4) Recientemente he leído un libro acerca de los hábitos y su poder para moldear nuestras vidas, tanto los buenos como los malos. Afirma el autor que el cerebro trata de automatizar cuantas más conductas le sea posible; lo hace a fin de ahorrar esfuerzos y poderse dedicar a tareas más complejas que requieren más esfuerzo intelectual y mental por nuestra parte. La práctica continua de una determinada conducta acaba incorporándose a nuestras pautas de comportamiento y, lo que es mejor o peor según se mire y de que hábito se trate, acabamos siendo aquello que practicamos. Si lo observamos bien todos nosotros tenemos unos determinados hábitos que practicamos seguramente la mayoría si no todos los días. En mi caso, me levanto, voy al baño, preparo el café y paso un tiempo con Dios; un rato que consiste en leer su Palabra, poner el día en sus manos y escribir mis pensamien...

SALMO 4/ GOZO Y PAZ

Imagen
Tú has alegrado mi corazón más que cuando abunda el trigo y el mosto. En paz me acuesto y al instante me duermo porque solo tú, Señor, me haces vivir tranquilo. (Salmo 4:8-9) Entiendo que los salmos son expresiones de la experiencia de David con el Señor; reflejan lo que Él significaba para el salmista, qué influencia tenía sobre su vida. En este salmo hace dos afirmaciones que me han hecho pensar sobre mi propia experiencia con Dios; David afirma que el Señor le provee gozo y paz. Ambas son dos características muy importantes para poder vivir una vida plena. En cuanto al gozo hace un contraste entre la alegría que produce el mosto y el trigo y la que trae Dios al corazón; en ambas cosas veo representados el placer y la prosperidad económica; cosas ambas buenas en sí, sin ninguna duda, pero que proveen alegría y no gozo. La alegría es un estado de exaltación emocional temporal producido por un agente o circunstancia externa. La alegría produce una satisf...

SALMO 3/ ¿DE DÓNDE VIENE LA SALVACIÓN?

Imagen
La salvación viene del Señor (Salmo 3:9) David escribió este salmo cuando estaba huyendo de su hijo Absalón que dio un golpe de estado y tomó el poder. David tuvo que ir, literalmente, con lo puesto, de forma apresurada e ignominiosa. Las multitudes que días antes le habían aclamado ahora se volvían contra él; en un abrir y cerrar de ojos sus circunstancias habían cambiado y del poder había caído al exilio. Su reflexión sobre la vida no es teórica, nace y surge de vivir una realidad de abatimiento, de perder el control sobre las circunstancias, de estar a la desesperada. Es en medio de todo esto que afirma que la salvación viene del Señor; esa es su fe, su creencia, su confianza y, supongo, también su esperanza.  En mi propia vida han habido situaciones en que, salvando las distancias, he sentido como David que perdía el control sobre las circunstancias y me veía sometido a las mismas. Recuerdo experiencias en las que no parecía que hubiera salida y,...

SALMO 2/ REFLEXION

Imagen
Y ahora, reyes, reflexionad, recapacitad jueces de la tierra. (Salmo 2:10) Me encanta la palabra reflexionar. Es un término de origen latino que gráficamente hablando quiere decir inclinarse hacia atrás para ganar distancia y perspectiva. Es una de las características más maravillosas que Dios ha dado al ser humano; es la capacidad de "salir de nosotros mismos" y observarnos desde la distancia; es ganar esa necesaria perspectiva que da el separarnos,  ver lo que de otra manera no podríamos ver y, con esa nueva visión que hemos obtenido, tomar mejores decisiones. El trabajo de reflexionar, aunque maravilloso, no es fácil. Hay varias cosas que lo hacen difícil. En primer lugar, para reflexionar hay que ser intencional; la reflexión no sale de natural en nuestras vidas; no estamos acostumbrados a ella ni la practicamos con asiduidad. Uno ha de tomar la firme decisión de pararse para ganar esa necesaria distancia y perspectiva. En segundo lugar, no nos han enseñado...